Síntomas de la Hepatitis c que se manifiestan en la piel, el pelo y las uñas
En ciertas ocasiones nuestro cuerpo nos da señales cuando algo anda mal. Muchas veces por desconocer síntomas o no tenerlos presentes, podemos estar frente a una situación que podría evitarse.
En la actualidad hay más de 71 millones de personas con hepatitis C y muchas de ellas no lo saben. ¿Por qué? Básicamente porque en muchos de los casos no presenta síntomas y no se realizan testeos masivos. Los nuevos tratamientos contra la hepatitis C cambiaron radicalmente la manera de avanzar contra la enfermedad.
Se pasó de inyecciones semanales a utilizar tratamientos con medicamentos vía oral que duran de dos a seis meses.(1)
En el siguiente artículo conoceremos las causas más comunes de la hepatitis C que se manifiestan en la piel, el pelo y las uñas. Conócelas ahora en el siguiente artículo.
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Causas La infección es causada por el virus de la hepatitis C (VHC), que busca propagarse por el torrente sanguíneo de una persona no infectada. El virus contaminado ingresa al cuerpo sano y comienza a circular y enfermar.
La hepatitis C crónica se comporta de un modo similar y lo que varía son las recomendaciones y tratamientos dependiendo del genotipo del virus.
La hepatitis C condiciona y afecta en mayor parte al hígado, pero también se manifiesta en otras partes de la piel: en los sarpullidos, manchas y picazón. Mayormente son los primeros indicadores de que el virus está presente en nuestro sistema.
Lamentablemente, el virus no posee síntomas. Tampoco se realizan campañas de testeo masivas para determinar si una persona posee el virus en su cuerpo. Por eso resulta tan importante mantenerse alerta ante síntomas que aparezcan en nuestro cuerpo: la piel, el pelo y nuestras uñas.
Lamentablemente, cuando se manifiesta de este modo en la piel, es una señal de que el virus ya afectó parte del hígado.
Problemas en la Piel
Cualquier síntoma que aparezca en nuestra piel debe ser consultado inmediatamente con el doctor. Si se identifica que se trata del virus VHC, se puede realizar un tratamiento específico que permitiría finalmente que sus problemas de piel se erradiquen por completo. (2)
Algunos tipos de problemas en la piel:
Ascitis Así se denomina a la acumulación de líquido en el vientre, derivada de la cirrosis (que se trata de una afección del hígado muy común que se genera con una mala cicatrización). El hígado dañado provoca alta presión arterial, afectando las venas de esa zona. En consecuencia se genera un aumento de peso generalizado, problemas para respirar y una facilidad en la aparición de moreteones en la piel.
El tratamiento sugerido para este tipo de problemas lo determinará un médico: suelen ser dietas estrictas, baja en sal, medicamentos diuréticos para erradicar el líquido excedente. En el peor de los escenarios se podría hasta realizar un transplante de hígado de ser necesario.
Sangrado y moretones fáciles
El hígado es el encargado de ayudar a coagular la sangre en el organismo. Cuando se detectan problemas derivadoes de la hepatitis, el funcionamiento se altera y comienza a sangrar. Esto hace que por ejemplo, cualquier golpe sea reflejado en un moretón muy evidente y que no podrá desaparecer por un buen tiempo.
Cuando detectamos este tipo de inconvenientes, debemos advertir a los médicos y profesionales de la salud antes de someternos a cualquier procedimiento (desde un dentista, pasando por un dermatólogo). Los golpes, cortes y cualquier tipo de herida, deberá recibir atención inmediata, se pueden tratar con vendas y presión para detener la hemorragia causada. La vitamina K y las plaquetas servirán para permitir la coagulación de la sangre.
Edema
De modo similar a la Ascitis, la acumulación de agua en otras partes del cuerpo como las piernas, tobillos y pies, harán que se cuerpo se hinche. El mal funcionamiento del hígado desestabiizará su organismo, generando estas acumulaciones. Al acudir al médico, probablemente sugiera una dieta baja en sal, acompañada de medicación que ayudará al cuerpo a eliminar el agua.
Ictericia Se puede detectar de un modo bastante rápido, ya que el tono de la piel y el fondo blanco de los ojos se tornan a un color amarillo o marrón. El mal funcionamiento del hígado provoca que la descomposición de la bilirrubina sea nula, acumulándose en la sangre y de este modo afectando a toda la piel. (3)
Este afección en particular puede emerger después de infectarse con Hepatitis C, luego de años de padecer cirrosis o infecciones.
Problemas en el pelo
Porfiria Cutánea Tarda (PCT)
Esta afección se manifiesta en ciertas zonas del cuero cabelludo provocando ampollas y escamas en la piel. Cuando una excesiva acumulación de proteínas porfirinas se da por el mal funcionamiento del hígado, comienzan las apariciones de ampollas, así como también puede producir la caída del cabello, el exceso de vello facial, oscurecimiento de la piel entre otras.
Problemas en las uñas
Uñas de Terry Otra de las consecuencias de la cirrosis son las denominadas “uñas de Terry”. Muy notorio en la parte superior de las uñas, la tonalidad puede tornar de un blanco opaco con líneas rojizas, a marrones.
Todos los síntomas descriptos son disparadores de consultas con el médico. Como pudimos ver al no realizarse testeos masivos, la Hepatitis C puede permanecer “silenciosa” mucho tiempo y quizás pueda ser demasiado tarde.
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