Ella nació con una extraña marca en el cuerpo. Sus padres hicieron algo increíble para que no se sienta diferente.

El amor por los hijos puede llevar a muchos padres a realizar actos sorprendentes, que muestran el infinito cariño que sienten hacia ellos.

Podría decirse que ocasiones son los superhéroes de sus pequeños, ayudándolos con las tareas de la escuela, acompañándolos a la plaza y festejando cada uno de sus logros.

Pero la historia que vas a leer a continuación va a emocionarte. Estos padres llevaron el amor por su pequeña hasta un nivel que no podrías imaginarte.

Honey-Rae Phillips, una niña británica de un año y medio de edad, nació con una extraña marca en la piel. La pequeña tiene una mancha rojiza que con el tiempo fue creciendo y hoy ocupa casi todo el lado derecho de su cuerpo.

Su mamá, Tanya Phillips, explicó que esto se debió a algunas complicaciones que la bebé tuvo después de nacer. Cuando nació, ella tuvo que luchar para poder respirar, y fue trasladada de urgencia a la unidad de cuidados especiales. Me rompió el corazón. Yo sólo sollozaba y sollozaba sabiendo que mi bebé estaría marcada de manera permanente por el resto de su vida, lamentó.

Pero estos valientes padres no se dieron por vencidos y decidieron que lo más importante en sus vidas, sería el bienestar de la pequeña Honey-Rae. Continuá leyendo la siguiente página para enterarte cómo sigue la historia.

Tanya y Adam, su esposo, deseaban de corazón que su hija no se sienta diferente por tener aquella marca. Y pensaron que una buena idea sería verse igual a ella.

Aprovechando el gusto que ambos tienen por los tatuajes, no vieron mejor opción que marcar en sus pieles un duplicado de la marca que la niña tiene en el cuerpo.

Pese a que para muchos resulte extraño, estos convencidos padres defienden lo que hicieron. Enteráte de lo que dijeron en la próxima página.

Como te comentamos, a pesar de lo extrema que resulte esta decisión para muchas personas, los padres de Honey-Rae se sienten realmente felices. Aunque el tatuaje fue algo doloroso, no se arrepienten de haberlo hecho.

Fue increíblemente doloroso, sobre todo porque tenía otros tatuajes antiguos que cubrir, pero valió la pena cada segundo. Cuando bajó la hinchazón, le mostré mi tatuaje a Hoeny-Rae y ella suavemente lo tocó, y sonrió señalando a su propia pierna, comentó Tanya.

Ahora a niña toca el tatuaje de sus padres y se siente identificada con ellos, por lo que no se sentirá extraña cada vez que mire su propio cuerpito.

Esta sin dudas es una historia que nos muestra que el amor de los padres puede llegar a ser infinito. No importa la manera en que lo demuestren, siempre que sus hijos puedan sentir su apoyo incondicional en cada momento de sus vidas.

Fuente: Upsocl