Hábitos Saludables Para Bajar De Peso
El metabolismo es un factor clave para estar en forma y mantener la línea.
Aunque con la edad este proceso natural se ralentiza y cuesta más mantener el peso ideal que queremos, no tires la toalla porque no está todo perdido.
Hay ciertos hábitos que pueden acelerar el metabolismo para quemar calorías a lo largo del día y poder suplir esa desaceleración que va experimentando el metabolismo a medida que cumples años.
Te enseñamos unos pequeños cambios que puedes incorporar tanto en tu rutina diaria como en tu alimentación para perder peso.
Desde luego que no hay una ley mágica para adelgazar, pero cambiando tus rutinas diarias sí que puedes conseguir tu objetivo más rápido y lucir una figura mejor (1).
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Las claves para cambiar el metabolismo Si eres de esas personas que engordan con una hoja de lechuga, estarás tan ansioso como nosotros por saber qué podemos hacer para mejorar un “mal metabolismo”.
La clave está en cambiar nuestros hábitos de alimentación, ejercicio y descanso.
Efectivamente, la alimentación es uno de los factores que pueden hacer variar nuestro metabolismo.
Los carbohidratos simples y azúcares favorecen un metabolismo lento; en cambio, una dieta rica en vitaminas, proteínas y grasas saludables ayuda a acelerar (junto a un aumento de la actividad física) nuestro metabolismo.
Apuesta por aquellos alimentos naturales para quemar calorías sin grandes esfuerzos, así como por vitaminas, como ciertos alimentos ricos en vitamina C.
Y no dejes de consumir hidratos de carbono, pues existen alimentos con carbohidratos para perder peso increíbles, como los frutos rojos.
El Ejercicio Físico
¿Y el ejercicio, cómo afecta al metabolismo?
La masa muscular (frente a las células grasas) favorece un metabolismo alto, por lo cual cualquier deporte va a beneficiar a nuestro objetivo, pero especialmente el trabajo de fuerza.
Por tanto, toma nota de los mejores ejercicios para tonificar y de los ejercicios para acelerar el metabolismo y quemar grasa que no pueden faltar en tu rutina. Por ejemplo, el yoga para activar el metabolismo es ideal.
Incluso cuando no se utilizan para mover el cuerpo, los músculos queman energía a lo largo del día para convertirla en calor y mantener la correcta temperatura corporal (36-37º) tanto en verano como en invierno.
El entrenamiento de fuerza o flexibilidad, aquel destinado a aumentar la masa muscular, es igual de importante para adelgazar (o más) que el típico entrenamiento aeróbico o HIIT, como correr, andar en bicicleta o nadar.
Y es especialmente importante a partir de cierta edad. A pesar de lo que se suele creer, no necesitas pesas o mancuernas para este tipo de entrenamiento; se puede conseguir más masa muscular sin máquinas.
¿Y qué pasa con nuestros hábitos diarios?
Algo de lo que no hemos hablado y que considero esencial es regular el nivel de estrés y el descanso.
El sueño y un nivel de cortisol equilibrado es clave para que las hormonas (esenciales en el funcionamiento metabólico) se mantengan en niveles fisiológicos adecuados y no nos jueguen una mala pasada. (2)
Empieza a perder peso con estos consejos:
- Come al menos cuatro porciones de vegetales y tres porciones de frutas diariamente.
- Reemplaza los granos refinados por cereales integrales.
- Come cantidades moderadas de grasas saludables, como el aceite de oliva, aceites vegetales, aguacates, nueces, mantequillas de nueces y aceites de frutos secos.
- Reduce el consumo de azúcar tanto como sea posible, excepto el azúcar natural de la fruta.
- Elige productos lácteos bajos en grasa, carne magra y carne de ave de corral magra en cantidades limitadas.
- Piensa cómo puedes aumentar tu actividad física durante el día si no tienes tiempo para una sesión formal de ejercicios. Por ejemplo, sube y baja las escaleras varias veces en lugar de usar el elevador, o estaciona en un lugar del estacionamiento que esté alejado cuando vayas de compras (3).
- Duerme entre 7 y 9 horas diarias.
- Mantén constancia en la hora en la que empiezas y terminas de dormir (4).
Cambia tu punto de vista
No basta con comer alimentos saludables y hacer ejercicio durante unas pocas semanas o incluso meses si deseas un control de peso exitoso a largo plazo. Estos hábitos deben convertirse en un estilo de vida.
Los cambios en el estilo de vida comienzan cuando miras con sinceridad tus patrones de comida y tu rutina diaria.
Después de evaluar tus desafíos personales para perder peso, intenta crear una estrategia para cambiar progresivamente los hábitos y las actitudes que han saboteado tus esfuerzos en el pasado.
Quizás tengas algún revés ocasionalmente. Pero en lugar de darte por vencido después de tener un revés, simplemente comienza de nuevo el próximo día.
Recuerda que estás planeando cambiar tu vida. No sucederá todo de una vez. Mantén el estilo de vida saludable y los resultados valdrán la pena (3).
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